Esta es la pregunta que se hacen continuamente los alumnos y alumnas de piano cuando llegan a clase y, después de "supuestas" sesiones de estudio, su profesor o profesora de piano les dice que no están bien abordadas las obras o estudios.
El problema reside en la forma de estudio que tienen. No consiste en repetir las obras o estudios desde el principio al fin sin reparar en nada, donde la concentración y la atención juega un papel mínimo. Así pierden el tiempo, la motivación y la esperanza de conseguir llegar a algún buen "puerto".
Los profesores intentamos trabajar en el aula utilizando estrategias que el alumnado debe usar en sus casas, pero que caen en el vacío la mayoría de las ocasiones, recurriendo siempre al mismo método: muevo los dedos por el teclado hasta que llegue la hora prevista de finalización del estudio... y así día tras día. El tiempo pasa demasiado rápido y las obras no llegan a su término en el momento preciso.
Con todo esto crece la preocupación en los padres de los alumnos y alumnas, si yo le oigo estudiar ¿cómo es que no hay ningún avance? ¿de qué forma les podemos ayudar en casa? Obviamente poco pueden hacer los padres cuando son los alumnos y alumnas las que tienen la solución en su cabeza y en un correcto método de trabajo fruto de la concentración constante.
Para poder ayudaros a padres y alumnos os brindamos un extracto de “Estrategias de aprendizaje para el éxito musical” de Michael Griffin, un educador, conferenciante, autor y pianista. Ha dado conferencias en veinticinco países. Sus tópicos centrales son la práctica, actitud, metacognición y motivación intrínseca.
Con todo esto crece la preocupación en los padres de los alumnos y alumnas, si yo le oigo estudiar ¿cómo es que no hay ningún avance? ¿de qué forma les podemos ayudar en casa? Obviamente poco pueden hacer los padres cuando son los alumnos y alumnas las que tienen la solución en su cabeza y en un correcto método de trabajo fruto de la concentración constante.
Para poder ayudaros a padres y alumnos os brindamos un extracto de “Estrategias de aprendizaje para el éxito musical” de Michael Griffin, un educador, conferenciante, autor y pianista. Ha dado conferencias en veinticinco países. Sus tópicos centrales son la práctica, actitud, metacognición y motivación intrínseca.
El cerebro del piano: la repetición
para el desarrollo del talento
Por Michael
Griffin
El
inflexible y automático conocimiento adquirido a través de la repetición es el
fundamento de una interpretación competente. De todos modos se debe hacer una
advertencia: el cerebro que aprende no distingue entre buenos y malos hábitos,
sino que aprende lo que repetimos. La repetición crea solidez y los hábitos son
difíciles de corregir. En particular, es esencial prestar atención a la precisión rítmica, ya
que los motivos rítmicos se instalan fuertemente en la memoria y son difíciles
de cambiar una vez establecidos.
Los
aprendices inexpertos luchan con la disciplina requerida para la repetición y
se adormecen dentro de una falsa sensación de maestría cuando juzgan que han
tocado un pasaje razonablemente bien. Sin la suficiente repetición, sin
embargo, el aprendizaje se desenreda pronto. Lo mejor para los profesores es
practicar ante los estudiantes, ejemplificando el “cómo” de la repetición y
dando a los jóvenes músicos un número específico de repeticiones como objetivo
en su práctica. Así como los estudiantes se convierten en aprendices más
maduros, ellos mismos regulan la repetición, dependiendo de la complejidad del
pasaje. Los expertos repiten pasajes cortos de música una y otra vez.
La mayoría
de músicos cesan de repetir cuando tocan un pasaje correctamente, pero es
crucial que continúen repitiendo después de este punto. Las conexiones
cerebrales se refuerzan y consolidan con la mielina, una substancia que aísla
el axón de una neurona, conocida como la sustancia blanca del cerebro. El
desarrollo de la mielina parece ser una clave para aprender y mantener
capacidades porque incrementa la velocidad y la precisión de la transmisión de
datos. La formación de mielina es más importante que el número de neuronas. El
cerebro de Albert Einstein, por ejemplo, no poseía más neuronas que el cerebro
normal, pero tenía dos veces más cantidad de mielina. Los expertos tienen más
mielina desarrollada en los circuitos neuronales correspondientes a su
especialidad que los no expertos. En 2005, un profesor sueco encontró una
correlación positiva entre el desarrollo de la mielina y el número de horas que
los pianistas profesionales practicaban. La mielina es producto de la actividad
y es un aspecto de la plasticidad del cerebro, un término que se refiere a
cambios físicos en el cerebro.
La
plasticidad cerebral incluye un incremento en la producción de mielina y un
incremento en el número de conexiones entre neuronas. En el aprendizaje
musical, incrementar la repetición de una frase tras tocarla correctamente
incrementa la mielina, que apoya una interpretación consistente y precisa.
“El amateur practica hasta que está
bien. El profesional practica hasta que no puede estar mal”- Stephen Hillier.
“El amateur cesa de repetir cuando
está bien. El profesional repite después de esto para consolidar el manto de
mielina de la vaina del axón”- Michael Griffin.
Es común
confundir los efectos de la interpretación temporal con el aprendizaje a largo
plazo. El profesor o el padre puede confundir la frase “pero yo lo toqué mejor
ayer” como una mentira inocente, y el estudiante podría desilusionarse porque
pensará que los bloques de repetición deberían haber sido suficientes para un
aprendizaje más permanente.
Hay dos
problemas aquí: primero, incluso con la repetición espaciada, el proceso de
consolidación lleva tiempo. No podemos predecir cuántas repeticiones requerirán
para resolver una habilidad, pero la naturaleza humana casi siempre subestima
esto. Si un pasaje que un estudiante pensó que aprendió ayer es un embrollo
hoy, el alumno debe repetir el proceso de repetición. Intentad no desanimaros.
Esta es una parte natural de adquirir una habilidad. Los recuerdos no se forman
justo en el momento del aprendizaje, así que puede llevar varias sesiones el
que las conexiones neuronales se vuelvan fuertes. Algunas personas parecen
aprender más rápido que otras, pero aprender no es una carrera, y todos somos
capaces de desarrollar habilidades complejas a través de la repetición. Puede
llevar a una persona seiscientas repeticiones durante dos semanas para
consolidar una frase, mientras que a otra persona puede llevarle solamente
trescientas repeticiones. Los alumnos deben aprender a ser pacientes y a creer
en el poder de la repetición.
REPETICIÓN
BLOQUEADA Y ESPACIADA
Recientemente
estaba viendo la televisión cuando una pausa para anuncios interrumpió mi
programa. Los anuncios son como poco molestos, pero este grupo de cinco
realmente me impactó. Esto es porque uno de los anuncios se repitió tres veces,
no seguidas, pero con un anuncio diferente en medio. Justo cuando lo había olvidado, el anuncio volvió para
hechizarme. ¡Yo que pensaba que la forma rondó era solo un concepto musical! A B A C A
El anuncio
repetido A estaba deliberadamente intercalado con otros comerciales. El arreglo
estaba inteligentemente diseñado para hacerme olvidar y recordar, y encontré
difícil retirar de mi atención el anuncio durante cierto tiempo después. Hube
de reconocer que esta técnica de márquetin era realmente exitosa. Había
“aprendido” el anuncio. Cambié de dirección esta molestia para mi beneficio.
Un
psicólogo alemán, Hermann Ebbinghaus, reveló con fama la “curva del olvido”,
proponiendo que los estudiantes olvidan el noventa por ciento de lo que
aprender en un período de treinta días. Más allá de este desalentador hallazgo,
la pérdida más significante de memoria ocurre durante la primera hora. La
memoria se hace más robusta cuando la información se repite en intervalos
medidos. A más ciclos de repetición, mejor aprendizaje, y a más espacios entre
las repeticiones, mejor.
Imagina que
tienes treinta minutos disponibles para practicar y has decidido trabajar en
tres pasajes concretos. ¿Cómo distribuirías esta cantidad de tiempo?
Pasaje A-
diez minutos Pasaje B- diez minutos Pasaje C-diez minutos.
O podrías
practicarlos de la siguiente manera:
Pasaje
A-cuatro minutos, Pasaje B – tres minutos, Pasaje A- tres minutos,
Pasaje C-
cuatro minutos, Pasaje B- cinco minutos, Pasaje A- tres minutos,
Pasaje C- seis
minutos, Pasaje B-dos minutos.
El primer
método se refiere a repetición bloqueada.
El segundo, como el ejemplo del anuncio de televisión, se conoce como repetición espaciada.
Repetición bloqueada se refiere a ceñirse a una tarea
sencilla hasta que se aprenda efectivamente, y entonces progresar hasta la
siguiente tarea de aprendizaje. La repetición
espaciada cambia entre diferentes tareas durante el curso de una sesión
simple de práctica. En ambos métodos, uno encuentra el mismo material para la
misma cantidad de tiempo total, pero con el concepto de la práctica
distribuida, espaciar las repeticiones expone a uno a aprender la tarea
repetidamente durante un período de tiempo más largo.
La repetición bloqueada es una técnica útil para
introducir nuevas habilidades para crear una base. Es efectiva para
principiantes ya que les permite concentrarse en una tarea sencilla. Incluso
para músicos avanzados, los pasajes muy difíciles requieren una concentración
sencilla que podría ser interrumpida si uno cambia frecuentemente entre tareas.
Sin embargo, la repetición bloqueada requiere de un compromiso intenso por
parte del estudiante. Si la concentración declina durante la repetición
bloqueada, el progreso puede estancarse y posiblemente deteriorarse. Es
esencial permanecer atento y totalmente alerta durante la práctica.
Dando por
sentado que el tiempo de práctica no sea restringido y que el estudiante tiene
la habilidad metacognitiva de determinar objetivos prácticos, la repetición
espaciada es más efectiva que la bloqueada. Variar tareas prácticas crea
frecuentemente interferencias, lo que lleva a un grado de olvido. Así como con
la práctica distribuida, los beneficios
de la repetición espaciada se reflejan en una formación más fuerte de la
memoria debido al principio de olvidar y rescatar (recordar). Cuando uno
revisita el material de aprendizaje una reconstrucción neuronal da lugar
dejando una impresión más profunda en el cerebro.
La
repetición espaciada puede ser frustrante porque conlleva fallos más frecuentes
y un mayor esfuerzo mental, pero las recompensas merecen este esfuerzo extra.
Los equipos de marketing y los estudiantes de música usan la repetición
espaciada, así como los atletas profesionales. Por ejemplo, los golfistas
tienen que jugar golpes de distancias variadas. Mientras los ejercicios de
repetición bloqueada requieren que un golfista golpee muchas bolas consecutivas
a una misma distancia antes de practicar a otra distancia, la repetición
espaciada alterna la distancia replicando las demandas reales en competición.
En esfuerzos basados en el talento como tocar el piano, los ejercicios pueden
aportar una ilusión de competencia. La mayoría de los profesores han escuchado
a sus estudiantes decir “Pero si me salía mejor ayer”
La
repetición espaciada puede funcionar en concierto con la repetición bloqueada,
por lo que los profesores de música deberían modelar cómo una sesión práctica
podría alternar entre las dos. La práctica técnica también debería ser modelada
a estudiantes en ensayos en grupo. En cualquier ensayo, apunto a revisitar los
pasajes que requieren la mayor atención al menos tres veces durante el ensayo.
Respondo a las quejas iniciales de los estudiantes (“Pero si hemos practicado
esa pieza ya”) explicando lo racional detrás de la repetición espaciada. Los
profesores no pueden esperar que sus alumnos integren estos conceptos de
aprendizaje si no los exhiben en su propia metodología.
Traducción realizada por Jesús Menéndez
Esperamos que estas técnicas de estudio os hayan sido de ayuda y recordad, lo más importante es no cejar en el empeño, mantener la concentración y, sobre todo,
NO DESANIMAROS.